Franz Geissenhof, Violín fino, Viena 1811 (certificado H. Köstler)
Franz Geissenhof fue el luthier más importante de la Viena de la época de Beethoven. Hacia 1800, se desligó definitivamente del modelo de violín estrecho y abovedado de su maestro Johann Georg Thir y se decantó por los modelos clásicos italianos, un capítulo importante de la historia de la música clásica vienesa, del que es ejemplo el violín de 1811 que aquí se ofrece.
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Franz Geissenhof fue el luthier más importante de la Viena de la época de Beethoven. Hacia 1800, se desligó definitivamente del modelo de violín estrecho y abovedado de su maestro Johann Georg Thir y se decantó por los modelos clásicos italianos, un capítulo importante de la historia de la música clásica vienesa, del que es ejemplo el violín de 1811 que aquí se ofrece.
Como instrumento típico de su mejor etapa de trabajo, este violín de Franz Geissenhof combina una impecable perfección artesanal con un carisma individual y lleno de carácter, encarnando así la alta y exhaustiva exigencia que Franz Geissenhof aplicaba a cada una de sus piezas. El barniz al aceite de color marrón rojizo oscuro es una reminiscencia de trabajos anteriores, mientras que el cuerpo perfectamente logrado refleja el estudio detallado del gran modelo Antonio Stradivari, con el que se asocia el giro artístico del luthier Franz Geissenhof. Músicos excelentes han grabado en el auténtico barniz, que nunca ha sido retocado, las huellas de su intensa interpretación, y gracias a su excelente estado de conservación, este violín conserva hasta hoy toda la plenitud de sus cualidades musicales de primera clase, sin reparaciones significativas, como cabría esperar de un instrumento histórico de esta edad. El respeto que este violín de Franz Geissenhof ha recibido durante generaciones también lo comparten los expertos de nuestro taller de restauración, que lo han examinado cuidadosamente y lo han preparado para que pueda tocarse. Como verdadera rareza histórica, cuyo origen confirma la nota original fechada del maestro, este violín extremadamente fino y codiciado es también una inversión de valor estable.
